Caperucita había cogido la cesta con la comida que mamá le
preparó y se puso en camino a casa de la abuela. Mamá le recomendó que
fuera por el atajo en vez de adentrarse en el bosque, porque ya era
temporada de tala y los leñadores andaban con sus sierras eléctricas,
sin mirar quién iba o venía por los caminos que proporcionaban sombra a
los caminantes. Ellos solo sabían que tenían que cortar mucha madera
para cobrar el jornal y después, ir a la taberna a beber cerveza.
La idea la contrarió porque le gustaba encontrar en el recodo de la roca rosada, al viejo lobo y echar una partidita de dominó con él, mientras se relamían una de las tortas que llevaba para la abuela y de paso, comentar las cosas raras que hacían los mayores y que a ella le costaba entender. Con el lobo era agradable charlar, ya que la escuchaba atento con sus enormes orejas, mientras la miraba fijamente y le guiñaba un ojo de complicidad, así que decidió arriesgarse y buscar a su amigo, cuando se despertó al lado del que ya era un extraño y olía demasiado a cerveza.
La idea la contrarió porque le gustaba encontrar en el recodo de la roca rosada, al viejo lobo y echar una partidita de dominó con él, mientras se relamían una de las tortas que llevaba para la abuela y de paso, comentar las cosas raras que hacían los mayores y que a ella le costaba entender. Con el lobo era agradable charlar, ya que la escuchaba atento con sus enormes orejas, mientras la miraba fijamente y le guiñaba un ojo de complicidad, así que decidió arriesgarse y buscar a su amigo, cuando se despertó al lado del que ya era un extraño y olía demasiado a cerveza.
Nani. Enero 2013.
Muy chulo Nani, me encanta esta revisión que has hecho del clásico. Mucho más interesante, je je.
ResponderEliminarUn besazo.
Menuda sorpresita eh?
ResponderEliminarBesos.
Si es que existen lobos con los que da gusto conversar...y leñadores con demasiado olor a cerveza...
ResponderEliminar¡¡Ole, ole y ole así se escribe!!
Besicos muchos.
A las Caperucitas nos fascinan los lobos, ¿te diste cuenta, Nani? Me encantó esta versión del clasiquito Grimm. ¡Mucha suerte en ENTC!! Beso va!
ResponderEliminarlos peligros de llevar una caperuza...y andar por los bosques....
ResponderEliminaryo también hice una reescritura de caperucita en un encuentro de talleres, hace un tiempo. podés toparte con ella en las notas de facebook. nunca te fies de caperucita!
besos,,nani*
Bonita versión de Caperucita la del sueño, lástima que la realidad aparece muchas veces a la vuelta de la esquina.
ResponderEliminarMe gusta tu lobo.
Un abrazo
Caperucita es más madura de lo que pensábamos.
ResponderEliminarMe hizo mucha gracia esta tuya, muchos besos, querida Nani.
Una muy bonita recreación de nuestra entrañable historia infantil.
ResponderEliminarQue bien que hayas participado.
Un beso.
Curiosa versión de este cuento que todos conocemos, pero que como tú has demostrado, puede tener distintos finales.
ResponderEliminarUn abrazo
El cuento es bello y el lobo trae sorpresa, aunque hay que ver lo atrevida que es nuestra "inocente" caperucita...(¿la cerveza?)
ResponderEliminar¿quie se comió a quien? mmmmm
Me gustó mucho.
Besicos
Bueno, pobre Caperucita.
ResponderEliminarSaludos.
E ingenioso cuento, muy bueno.
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