Le
había inutilizado los frenos
sin demasiada intención, solo quería que llegara tarde y lo pudiera sustituir.
La novia esperaba con su bonito vestido blanco, el sacerdote con su libro de
ceremonias y el padrino impaciente mirando la hora.
Cuando
se dio cuenta había chocado y casi cayó al precipicio. Lo rescataron con una
brecha en la frente, pero con ganas de llegar a su boda.
El
policía que le hizo la cura de emergencia, lo llevó hasta la iglesia y se
descubrió el pastel. Se volvió con el insurrecto esposado y los novios se
juraron amor.
Todo
estaba claro, no hubo necesidad de juicio.
Nani, abril 2025
Muy avispado el policía , y tonto el que hizo con los frenos se le vio desde lejos que quería sustituir al novio ajjaj.
ResponderEliminarBesos.
Hay amores que "casi" matan, jajjaa
ResponderEliminarBesos.
El pasteleo fue descubierto y el pastel se lo comieron los que tocaba.
ResponderEliminarBesos.
Todo se resolvió a pesar del infiltrado...La vida termina poniendo todo en su lugar, Nani...Buen micro, amiga escritora.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz tarde.
Estimada nani, deseo que ese trabajo de investigación sea todo un éxito.
ResponderEliminarEl tiempo pone las cosas en su sitio.
Excelente querida Nani.
Nos vemos pronto
Feliz verano.
Historia al fin y al cabo romántica y diferente... Bien hecho, Nani.
ResponderEliminarAbrazo hasta vos!!