Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Ella también se había equivocado. Ella había creído que la quería. Ella había confiado en él. Ella, creyó que estaba en cenas de empresa cuando le decía que llegaría tarde una noche tras otra. Ella le creyó, cuando le dijo que estaría una semana en la sucursal del Bilbao.
Ella, como la paloma de Alberti, también creyó que el mar era el cielo, que la noche la nevada... y se equivocaba.
Siempre le había esperado. Siempre había confiado en él. Siempre le anhelaba con una ansiedad que...
Mientras, seguía leyendo el poema de Alberti....
Se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Ella también se había equivocado. Ella había creído que la quería. Ella había confiado en él. Ella, creyó que estaba en cenas de empresa cuando le decía que llegaría tarde una noche tras otra. Ella le creyó, cuando le dijo que estaría una semana en la sucursal del Bilbao.
Ella, como la paloma de Alberti, también creyó que el mar era el cielo, que la noche la nevada... y se equivocaba.
Siempre le había esperado. Siempre había confiado en él. Siempre le anhelaba con una ansiedad que...
Mientras, seguía leyendo el poema de Alberti....
Que tu falda era tu blusa.
Que tu corazón....
Si, su corazón ya estaba hecho añicos y se derrumbó por completo.
En realidad, había intentado mantener todo su aplomo, pero interiormente ya se había derrumbado desde aquel día que le confesó haberle mentido tantas y tantas veces, porque no había sido nunca el hombre que ella creyó.
Él, siempre había sido un agente de la policía internacional, que intentaba desenmascarar a su padre. Un traficante mundialmente conocido y buscado y que la policía estaba ansiosa de echarle el guante.
Desde entonces ella... Ella se durmió en la orilla de la nostalgia y él, él se fue por donde llegó, antes de proponerse quitar la máscara a aquella banda de indeseables.
Nani. Abril 2008.
Amo esa canción de punta a punta. Cuantas veces no creemos solo lo que queremos…me ha recordado a aquella película de “Caminar Sobre el agua” altamente recomendable.
ResponderEliminarA veces, nos cegamos tanto...que aunque lo veamos, jamas lo reconocemos.
ResponderEliminarSer engañado, sentirse engañado... es una de las peores sensaciones del mundo...
Un besitooo
Ella, en el fondo, al igual que la paloma, presentía la verdad... pero el camino equivocado era más bonito y la hacía demasiado feliz...
ResponderEliminarMuy bueno. Besos
esto es un poco 'ojos que no ven, corazón que no siente'
ResponderEliminarPues oye, conforme iba leyendo pensé que le había puesto cuernos de colores el tío... así que lo de ser plicía, no me pareció tan terrible... un mal menor, aunque claro, estoy inestable estos días, jejeje
ResponderEliminarKisses
... que mal se siente uno cuando se reconoce engañado... es una de las peores cosas q pueden sucederle a un ser humano....
ResponderEliminarTe quedas como papel mojado, lacio y sin ver luz en ningún lado....
Un beso. Marea@
¡qué asco de tío! a mi me hace eso mi pareja y ten por seguro que no se va de rositas --<@ jajajaja...es broma...o no...
ResponderEliminarBesitos guapa
Intriga internacional, romance y traición... Todo eso a partir de unos versos de ALberti...
ResponderEliminarMe dejas sorprendido...
Sabes la verdad, pero muchas veces te puede más el no querer ver las cosas, que el tenerlas delante de nuestras narices.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues... a mi no me parece tan grave... yo pensaba que la engañaba con mil mujeres...
ResponderEliminarEs más, yo (que soy una flipada) me habría entrenado para, junto a él, poder desenmascarar a los malos... jajajaj!!!
Ya he dicho que soy una flipada???
Mil besos!!!
Juass, eres la leche eligiendo finales, jajajajaj.
ResponderEliminarTe veo como guionista de una de esa pelis de sobremesa. Lo digo como un halago, yo es que me engancho a todo y esas pelis en el fondo me gustan. Sí lo sé, ésta confesión acabará con mi poca reputación, jajajajaja.
Besazos.
¿Cómo puede uno saber que nos equivocamos? A veces el amor no nos permite.
ResponderEliminar¿Será que nuestras palomas deben traer corazas y/o lentes?
Es simplemente el amor.
También me gusta Alberti.
Besos preciosa.
De Alberti a Schwarzenegger en unas pocas líneas. No está mal.
ResponderEliminarUysss ... cuando lo he leido la primera vez pensaba que la estaba engañando con otra, jejejeje.
ResponderEliminar¿Has pensado en continuar el relato?
Es que me quedo así como a medias, jejeje.
Besotes.
Un placer volver a leerte y comprobar que la inspiración no te abandona,un besiño!
ResponderEliminarAy!!!! Creí que era un engaño cualquiera... aunque sí fue un engaño, creo que al final le salió el tiro por la culata. Excelente relato, espero que no sea cierto.
ResponderEliminarMe gustó y me impresionó.
Nos vemos Bsss.