
En honor a la frase del campeón de campeones Manu de "La espada oxidada"
No reconocí al hombre que tenía frente al espejo, pero tampoco a la que decía ser mi esposa, ni al joven que la acompañaba. Solo recuerdo un golpe y un fuerte dolor de cabeza.
Mi destino no podía ser tan cruel, ni merecía haber perdido tanto tiempo. Por ese motivo cuando volví a mirarme, estrellé el florero sobre el cristal azogado.
Nani, Septiembre 2009.