ASOMBRO
No sé, murmura Manuela compungida mientras
se mira las manos vacías. Niega con su cabecita¸ encoge los hombros y las mira
de nuevo sin dar crédito a la desaparición. Las había tenido llenas y ahora
gimoteaba mientras descubría con asombro, que sus manitas quedaban peguntosas y
llenas de algo que parecía caca.
La seño le
vuelve a repetir de manera cariñosa, que las chocolatinas no se pueden apretar
tanto porque se derriten con el calor del cuerpo.
Nani. Marzo 2013
DUDAS
No sé, murmura Manuela
compungida mientras
mira su cuenta de ahorros. No sé qué voy a hacer, me quedan 120 euros, es 15 de
marzo y el día veinte cumple el plazo de la hipoteca. No sé si ir con el bate
bajo el abrigo a hablar con el director del banco, pedir en la puerta de la
iglesia aunque haya mucha competencia o dejarme caer por el puente.
Nani. Marzo 2013
Qué lastimita da tu primera Manuela, Nani, bueno y la segunda también. Qué duro es aprender las lecciones que nos da la vida.
ResponderEliminarUn besazo enorme a las tres.
Hola Nani. La pequeña asombrada por sus chocolatinas derretidas me gusta por lo entrañable de la escena.
ResponderEliminarEn "Las dudas", creo que te has visto influenciado por tantísimo micro de denuncia por lo de los micros indignados.
Pero de todas formas, tus micros tampoco entraban dentro de esa "mayoría" que apuntaron en la radio (el tema padres), así que un DIEZ por originales.
Besos desde mis palabras y buen fin de semana.
Una y otra no entienden que la vida tiene extrañas complicaciones.
ResponderEliminarLa pequeña ya lo entenderá. La otra...¡ah, veremos como sale adelante!
Un abrazo, querida Nani
Esta vez no sé por cuál decantarme (qué manía la mía, esta de elegir)
ResponderEliminarLa primera es tierna y me has recordado a mi niña...
la otra tan actual, dilema para tantas familias.
Me gustaron ambas.
Un abrazo
Son las locuras a las que nos empuja el paso del tiempo.
ResponderEliminarO la ignominia de aquellos a quienes les dimos responsabilidades.
No sé por qué se me viene a la cabeza la plaza de la Bastilla.
Debo de estar cada vez peor.
Real como la propia vida...
ResponderEliminarChocolatinas y ese rostro que imagino me llena de ternura,lo segundo de tristeza y de impotencia....
ResponderEliminarTe abrazo guapa mía!!!!!!! Se te quiere.
Manuela no sabe y se asombra. Apretó las chocolatinas y terminó derritiéndolas en su mano. Aprenderá de la fragilidad y el cuidado, del equilibrio de fuerzas…¿aprenderá?
ResponderEliminarManuela no sabe y tiene dudas. Se siente una chocolatina en las manos de un gigante impiadoso que aprieta, cada vez más y más fuerte….
Asombro y dudas, un retrato de nuestra vida cotidiana. ¡Buen trabajo, Nani!
Mil besicos guapísima, con todo cariño!
Buenos micros, Nani. El primero retrata de maravilla esa escena con una Manuela chiquitita descubriendo la vida. El segundo, muy duro y demasiado habitual para tantas familias...besitos.
ResponderEliminarLo del banco me ha recordado que hoy mismo voy yo a una sucursal a mendigar..., y tengo chocolatinas derretidas.
ResponderEliminarUn saludete.
Juan M
Lindos micros. Dicen tanto con tan pocas palabras...
ResponderEliminarBesos
El primero es muy tierno, el segundo duele.
ResponderEliminarBesos.
Dos despojos. A mi sigue asombrándome la capacidad de crear historias en tan poco plazo de tiempo. En fin, sospecho que tus relatos no pasan el filtro de políticamente correctos que se ponen los chicos de la radio. Por decirte algo "malo", creo que explican demasiado. Algo bueno, creo que consigues el tono acertado.
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ResponderEliminarAy, ternura y dolor. Como si fuera una niña y una anciana.
Abrazos, querida mía.
Todo era más fácil cuándo nos asombrábamos de enanos.
ResponderEliminarLas dudas adultas...ufff.