Foto tomada en "LOS LLANOS" de Alcalá la Real
Esta es la propuesta de esta semana Relatos de Verano, con el programa La Ventana de la Canena Ser.
Me
desperté temprano y desconcertada observé que había dormido en la cabaña. Me
levanté, bajé, me refresqué con el agua de la fuente, comí algo y volví a salir.
Encontré la vieja Vespa de mi padre en la porqueriza, tenía la llave puesta, me
subí y con asombro descubrí que recordaba ponerla en marcha. Sin apenas darme
cuenta tomé el camino de las vacas y subí la ladera. El viento impulsaba el
pelo hacía atrás, la respiración se fue serenando y de pronto noté de nuevo, la
paz que hacía tanto había olvidado.
Nani. Julio 2013
Uno de esos reeencuentros con algo del pasado nos devuelve a veces una paz inexplicable. Qué pena que esos momentos sean tan raros e infrecuentes.
ResponderEliminarUn beso apacible, Nani.
Juan M
Habría que volver alguna vez, a los sitios donde crecimos, sentimos, descubrimos... aunque se corre también el riesgo de no encontrarlos como los dejamos...
ResponderEliminarUn beso Nani
Rosy
Ay mi Vespa... donde estará?
ResponderEliminarCon lo bonita que era.
Besos.
Qué ganas tengo Nani, de que me pase algo así.
ResponderEliminarLo necesito.
Así es muy fácil ! Agua fresca, encuentra comida y además sabe subir en Vespa .
ResponderEliminar;D
Un abrazo ¿ de calor bien ?
Ese paseo contigo en la vespa de tu padre me gustó tanto... Gracias Nani, me hizo muchísimo bien.
ResponderEliminarBesitos de menta y limón con burbujas de aire fresco,
miles.
Reincorporada de mi descanso te envío un recuerdo en esta relajante y fresca entrada.
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