Duendecillo dibujado por Maria Pan, hoy Rosy, si está hecho especialmente para este micro.
Había brotado, en medio del huerto, un imponente piano de
cola, fruto de unas semillas que
esparció aquel duendecillo que cayó en el sembrado, después de un destello que nos
cegó durante día y medio. Según decía,
sus compañeros lo olvidaron y se dedicó a sembrar las pepitas que traía en el
bolsillo. Después recolectó libros que
nos enseñaban lo importante que es ser feliz, recogimos bulbos que
producían sonrisas y ganas de abrazar, y cuando creímos que no brotaría nada
más, mire usted por donde, además crecieron besos.
PARTITURA INÉDITA
Había brotado, en medio del huerto, un imponente piano de
cola. Correspondía a una nueva hortaliza familia de
zanahoria o chirivía pero de color azul cielo y que sembró el abuelo la
primavera pasada. Decían que no crecería y él, que sí. Pero lo que más alucinó
a los científicos que fueron a observar el nuevo producto, fue que al coger el
pelador e introducirlo para verlo y probarlo, sonó una melodía inédita que
decían correspondía a una partitura no conocida oficialmente de Albeniz y que
perdió el 1 de enero de 1886, día en que nació su hijo Alfonso.
Nani. Febrero 2014