Imagen recogida de la red
No
conseguía entender lo que pasaba. Más tarde les notaba distintos. Después era
ella la que tenía mala cara y a él le vi llorar en el baño. Siempre creyó que
no lo veía, pero no he olvidado la pena que se le colgaba a la espalda, lo
mismo que una mochila cargada de piedras. Después les escuché decir que desde
que Virtudes vino la primera vez, todo cambió. A ella le gustaba mucho salir
con Virtu, ir al cine o a tomar un café por las tardes. En ocasiones y mientras
él trabajaba, ella venía y la ayudaba para que le quedara más tiempo y ambas se
sentaban en el salón a charlar, reír e incluso cogerse las manos. A él le
escuché decirle que se iba a casa de los abuelos, mientras ella decidía que era
lo que de verdad quería. Ella decía que nunca se lo había planteado y yo no
entendía nada. Triste él, también ella y yo no sabía que pasaba. Un día les
pregunté y me dijeron que no me preocupara, que nos querían mucho y que no
deseaban que lo pasáramos mal, pero cuando no se entiende, todo resulta obscuro.
Otro
día mientras preparaban la ensalada, Virtudes le dijo que debía salir del
armario, que no vivía así, ni tampoco los demás. Que sabía que no tuvo la
oportunidad de ver lo que realmente se escondía dentro y como una loca, me fui
a mirar, pero en el armario solo había ropa y zapatos, además de las sábanas
que bordó la abuela. Ellas nunca se enteraron de que escuchaba cuando creían
que miraba la televisión, jugaba con mis muñecas o hacía los deberes.
Cuando
volvió de estar con los abuelos, escuché decirle que no era posible seguir
juntos y que todo debía hacerse de manera que a nosotros no nos afectara. Lo
hicieron muy bien para que lo pudiéramos entender…, con sus enormes dudas al
principio. La satisfacción de tenerles
como padres hoy me llena de orgullo, pero al principio fue trabajoso y muy
lamentable en ocasiones con el resto de mortales, pero supimos crecer. Las
dificultades nos enseñaron a respetar, valorar y procurar no hacer juicios sin
más.
Nani.
4 de julio de 2017
Tendrán que pasar años y generaciones para que lleguemos a entender la complejidad de la Vida y aceptarla tal como se.
ResponderEliminarTampoco es tan difícil, Nani.
Gran relato de rabiosa actualidad.
Un beso.
Por lo que estamos viendo en estos últimos tiempos, como bien dices, tendrán que pasar años y sobre todo, tendremos que ser más empáticos y respetuosos.
EliminarBesicos muchos.
Tal y como es quería decir.
ResponderEliminarSí Tecla, lo entendí. Gracias.
EliminarMás besicos.
Cuánto dolor durante vidas enteras por culpa de la incomprensión general.
ResponderEliminarBuen relato.
Besos.
Sí Toro, demasiado dolor y mucha imcompresión, falta de respeto, etec., etec.
Eliminarbesicos muchos.
Cuando hay hijos de por medio, dar el paso que cambie tu situación a veces se retrasa, demasiado. Un micro muy apropiado para esa celebración donde el orgullo nunca está de más.
ResponderEliminarUn beso fuerte Nani, encantada de leerte.
Rosy, siempre que hay complicaciones que incumben a los que queremos, todo se demora y a veces hace más daño que beneficio, no crees?
EliminarBesicos muchos.