sábado, 7 de noviembre de 2020

RECORDANDO UN POEMA



 Imagen del artista brasileño Luis Philippe

Ayer pasé por la agencia de viajes a pedir que me permitieran cambiar el bono de viaje que tenía reservado para este fin de semana. Debido al confinamiento no podremos salir de nuestra ciudad, así que lo vamos a aplazar para la próxima primavera con el acuerdo mutuo, de que si todo sigue igual lo dejaremos para más adelante.

Le he pedido a mis hijos que deshagan sus maletas, mi marido cabizbajo está haciendo lo propio y yo que tengo las mías en el hueco de la escalera, cuando he vuelto de retirar la reserva y las he mirado, me he alegrado de que esta vez no me vayan a servir. Compruebo que pesan demasiado, que he guardado muchos archivos no resueltos y balances por terminar, así que como toca tiempo de reflexión y de recolocación, creo que para no volvernos locos del todo, voy a ir sacando archivo por archivo y lo voy a desmenuzar. Lo que esté pendiente de un hilo, voy a ver qué solución tiene; que creo la  tendrá y si no fuera así, lo llevaré al cubo que tengo en el patio y le prenderé fuego para que no dé más vueltas y aparezca cuando menos falta hace. No quiero que transforme en gris lo que se auguraba verde esperanza. Debo solucionar el problema que tengo y dejar de meter a empujones, lo que no merece la pena. ¡Nada como sacudir telarañas! Algo así o parecido, decía mi querida Gloría Fuertes en un poema.


Nani. Noviembre 2020

15 comentarios:

  1. Pesadas maletas para cargar con ellas.

    Besos.

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    1. De vez en cuando hay que aligerar el peso, Alfred.
      Besicos muchos.

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  2. Estupenda reflexión Nani. Un abrazo😘

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  3. También recuerdo siempre versos cuando vengo aquí, a Rosales y su casa encendida.
    Da igual adonde vayas, siempre vas contigo mismo.

    Kuss

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    1. Así es, a Rosales le debo el nombre de este blog, Inma.
      Besicos muchos.

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  4. Buena idea. Tomo nota y me pongo yo también a limpiar telarañas. Un beso grande, Nani

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    1. Margarita, de vez en cuando hay que sacar el plumero, que se acumulan las telarañas y nos nos dejan ver.
      Besicos muchos.

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  5. Sacando la viejo y reemplazando por nuevo. Solucionando la cosas y dejando sitio para lo nuevo. A veces pesan demasiado y hay que ir dejando cosas atrás. En fin limpiando telarañas. Jjj

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    1. M. Lola, lo mismo que se hace en la Candelaria o en San José. Hay momentos que no se pueden dejar para después.
      Besicos muchos.

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  6. Respuestas
    1. Sandra, de vez en cuando hay que parar y ver por donde hay algo que estorba.
      Besicos muchos.

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  7. Necesitas lo imprescindible, ni más ni menos.
    Un saludo.

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    1. Así es, para el camino cuanto más ligeros de equipaje, mucho mejor.
      Besicos muchos.

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  8. Mal asunto llevar el trabajo y los problemas en un viaje familiar. Casi mejor que lo hayan tenido que suspender.
    Felicidades por el relato. Un saludo.

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