Cuando
vuelvo del trabajo en el turno de noche, suelo coger el autobús cinco que me
deja a quince metros de casa. En el suele viajar un señor mayor que vive a unos
metros de mi domicilio. Siempre me acompaña hasta verme dentro de mi portal y subiendo
las escaleras, porque dice que no se queda tranquilo hasta no ver como se
ilumina mi salita. Para que se quede tranquilo, suelo asomarme a la ventana y
le doy las gracias de nuevo y las buenas noches, tirándole besos con la mano.
Él retrocede el camino andado, ya que si no quisiera acompañarme, se quedaría
exactamente a unos pasos de su casa. Se lo agradezco infinito, en el fondo no
sé si será verdad que vuelve de casa de sus parientes, donde dice suele cenar.
A veces me da la impresión, que me espera en el trabajo y luego hace el paripé,
para qué crea es casual nuestro encuentro. Lo cierto es que ya le aprecio de
manera especial y si algún día no le encuentro, me preocupa como pasó en la
primera ola de la pandemia que según después me contó, tuvo un resfriado gordo
donde debieron tenerlo en observación por si acaso hubiera cogido el virus, e
incluso le dejaron en cuarentena.
Solemos
ir muy poquitos en el autobús y desde casi el primer día, conectamos. Él iba
leyendo “Los renglones torcidos de Dios” de Torcuato Luca de Tena y como se dio
cuenta que le miraba con cierta fijación, me preguntó si había leído dicha
novela. Le contesté que no, que había escuchado hablar de ella, pero que nunca
me llamó la atención. Me dio alguna pincela y me dijo que como la estaba
terminando, que si quería me la dejaba, ya que parecía que íbamos a coincidir
en nuestros viajes nocturnos. También me comentó que era muy interesante y muy
adecuada coincidiendo con los trastornos sicológicos que la pandemia está
dejando en las personas. Que era necesario hablar de los problemas de la mente
y sobre todo, hacerlos visibles. Le comenté que en unos días cambiaba de turno,
pero no le importó y como ya sin darme cuenta le había contado cuales eran mis
horarios, me dijo que así tendría tiempo de leerlo y devolverlo en el nuevo
turno de noche. Esa fue la manera de conocernos, luego fueron muchos los comentarios
de textos, los intercambios de libros (más de él a mí) e incluso, algún café y
desayuno compartido. Sin darnos cuenta, surgió una bonita y respetuosa amistad.
Me
recordaba a mi abuelo fallecido cuando era adolescente y no me costó conectar con él. Él me contó
que había tenido una hija que murió con mi edad y que se la recordaba. Más
tarde supe entre lágrimas compartidas, que esa hija fue violentada en una
parada de autobús y que a consecuencia de ello, murió. Su esposa, no lo superó
y hoy está en una residencia donde juega a muñecas y él, se juró no dejar a
ninguna chica sola mientras viviera.
Cuando
supe todo ello, le pedí que me dejara llamarle abuelo. Me contestó que le
estaba devolviendo la vida y la ilusión. Ahora sé, que con mi horario nocturno he ganado un abuelo y hemos decidido no pasar ni una Navidad más, cada uno en su casa.
Nani.
Diciembre 2021
Maravilloso relato y relación se ha formado... Me diste ganas además de releer a Torcuato Luca de Tena (Los hijos de la lluvia)... España cielo inagotable de escritores y poetas como estrellas!!
ResponderEliminarAbrazo ida y vuelta.
Releer a ese autor, siempre es aprovechar el tiempo, Carlos. Totalmente de acuerdo contigo.
EliminarBesicos muchos.
Hermoso cuento donde dos personas se complementan en una bella amistad.
ResponderEliminarAbrazo.
Me alegro Alfred, que así te parezca. Agradecida siempre!!
EliminarBesicos muchos.
Ay qué pena...
ResponderEliminarVamos... cuento de navidad emotivo a más no poder.
Besos.
Siento haberte apenado, Xavi.
EliminarBesicos muchos.
Maravilhoso relato Nani.
ResponderEliminarUm verdadeiro conto de Natal.
A mútua cumplicidade com um "avô" ocasional, gerou uma bonita amizade, como se fosse um renascimento!
Perfeito. Gostei muito!
Un buen fin de semana.
Besicos muchos.
Albino, ya sabes los sensibles que nos ponemos con estas fechas.
EliminarMe alegro que te haya llegado y siempre agradecida!!
Besicos muchos.
Me ha encantado el relato traduce una situación real como tantas, pero en este caso los protagonistas tienen suerte de tenerse el uno al otro.
ResponderEliminarMuchas gracias M. Lola. Me alegra saber que te ha llegado.
EliminarBesicos muchos.
Que emotiva historia nani, cuando se llega a cierta edad, si estás acompañada con tu compañero muchísimo mejor.
ResponderEliminarFeliz navidad. Un abrazo largo largo.
La verdad Carmen, es que a veces la soledad nose lleva bien.
EliminarMe alegra saber que te ha resultado emotiva.
Besicos muchos.
Nani, si que te ha inspirado la fotografía de está semana, un cuento muy emotivo.
ResponderEliminarUn beso.
Ángel, la foto es que me encendió la lucecita.
EliminarMuchas gracias por tu generosidad.
Besicos muchos.
Los renglones torcidos de dios es un libro maravilloso que tengo aqui en mi biblioteca, un relato muy lindo amiga.
ResponderEliminarEs un libro maravilloso y que tengo ganas de releer, Sandra.
EliminarBesicos muchos.
He tenido que parar un momento de leer, pues las lágrimas no me dejaban. Tu relato es de una gran ternura Nani.
ResponderEliminarAbrazos.
Siento mucho haberte hecho llorar, Conchi. No era mi intención.
EliminarTe dejo todo mi cariño.
Besicos muchos.
Me ha llegado profundo tu relato, Nani, has escrito un hermoso cuento de Navidad, conmovedor, entrañable...
ResponderEliminarBesos mil
Me alegro Milena que te haya llegado. Muchas gracias por pasar.
EliminarBesicos muchos.
Qué belleza de relato has escrito, Nani. Me ha encantado.
ResponderEliminarBesicos.
Muchas gracias Galilea!!
EliminarBesicos muchos.
ResponderEliminarConmovedor relato, Nani, qué sensibilidad tienes y qué buena gente eres. Me quedé abstraído tras leerte.
Muchísimas gracias por compartir emociones.
Un fuerte abrazo.
Teo
Muchas gracias Teo, eres muy generoso. Me alegro que te haya gustado.
EliminarBesicos muchos.
La revelación final del abuelo me pareció notable.
ResponderEliminarLa saludo con afecto desde Santiago de Chile.
Bienvenido Franz a esta tu casa.
EliminarAgradecida por tu comentario.
Besicos muchos.
Una historia muy entrañable. Muy de Navidad. Enhorabuena y mucha suerte!!
ResponderEliminarFeliz Navidad
Muchas gracias Juanma y bienvenido a esta tu casa.
EliminarFeliz Navidad y un venturoso y lleno de salud, 2022.
Besicos muchos.
Un relato muy emotivo, Nani. Te deseo mucha suerte!
ResponderEliminarBesos apretados.
Muchas gracias Pilar!!
EliminarBesicos muchos.