Imagen tomada de la red
A cada vuelta del tambor
de la lavadora algo
sonaba poco normal. Una vez fue una piedra de rio, otra el muñeco de la hermana
y hoy suena a lata.
La
abuela ha ido a mirar en el rincón de la alacena y vuelve toda asustada. Todos
sus ahorros estaban hacía rato en la lata de las galletas, hoy no sabe que
resultará después de los 90 grados y del centrifugado.
PAYASADAS
A cada vuelta del tambor
de la lavadora era
más aterradora su pretendida sonrisa. Como último recurso, había decidido lavar
al parlanchín del payaso que tanto miedo le daba a su hija. Decían que su
misión era hacer reír, pero evidentemente había demostrado todo lo contrario,
por eso decidió meterlo en la lavadora y comprobar si conseguía borrar esa
sonrisa malvada y limpiar su asquerosa lengua. Si después del centrifugado
seguía igual, iría derecho al contenedor o lo haría picadillo. Lo importante
era que no aterrará a nadie más.
Nani. Abril 2015
Me quedo con la idea de borrar esa sonrisa siniestra al payaso. Si funciona, me dices el modelo de tu lavadora para hacerme con una. Buenas propuestas.
ResponderEliminarSuerte con la siguiente. Besotes
Me quedo con la idea de borrar esa sonrisa siniestra al payaso. Si funciona, me dices el modelo de tu lavadora para hacerme con una. Buenas propuestas.
ResponderEliminarSuerte con la siguiente. Besotes
Con un poco de suerte "los dinerillos de la abuela" si están en la lata igual salen indemnes...jejeje.
ResponderEliminarEl payaso tiene peor futuro, me da que va a terminar en el contenedor...algunas sonrisas siniestras no tienen solución ni en las lavadoras.
¡¡Me han encantado los dos relatos!!
Muchos besicos, mi querida Nani.
Esa abuela pensando en cómo quedarán sus ahorros resulta enternecedora.
ResponderEliminarMuchos besicos.
La abuela ha blanqueado el dinero....
ResponderEliminarEs Doña Bárcenas.
Besos.
Cosas de niños, pero para vigilarlo y no perderlo de vista...
ResponderEliminarEsos payasos han hecho mucho mal a los niños. Yo creo que la cosa viene desde la película Polstergueitts, o como se escriba. Me gusta que lo hayas metido a la lavadora a ver si mejora.
ResponderEliminarCon respecto a la lata... ¡una pena por la abuela!... dicen por ahí, que para eso están los bancos y las entidades de ahorro... jajajajajajajá....
Un besazo Nani.
Bueno, pues me imagino que a partir de ahora en esa casa se lavará en frío :). El de los payasos me ha llevado a cuando era pequeño y se pusieron de moda los muñecos esos en muchas películas de terror ochenteras. Buenas apuestas. Mucha suerte :)
ResponderEliminarNani, qué buena solución para borrar esa sonrisa, que sí puede ser de lo más aterradora. Besos.
ResponderEliminarMe han encantado los dos....Eso de borrarle la sonrisa siniestra me anoto aunque no quepa en la lavadora.
ResponderEliminarMil besos compartidos.