lunes, 22 de abril de 2019

CUANDO LLEGA EL LOBO


Temblamos primero de miedo. Más tarde todo cambió y el temblor se hizo emoción. Lo que en un principio nos paralizó, se convirtió en delicia. Pareció que la amenaza nos fulminaría y temimos por nuestra estabilidad, después el cielo se abrió y dejó de llover, de tronar y los relámpagos y rayos se tornaron en color. El arco iris que nos iluminó y nos dejó seguir el camino hasta casa, fue lo que nos marcó a lo largo de la vida. Cuando asoman las orejas del lobo, suele dar un vuelco la vida.

(Se quedó sin enviar)
Nani. Abril 2019

12 comentarios:

  1. Ver las orejas al lobo, hace entrar en meditación profunda.

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    1. Y alguna vez se las vemos Alfred. Eso nos hace crecer.
      Besicos muchos.

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  2. Bonito y reflexivo texto amiga. Ese lobo me da miedo.....saludos

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    1. Muchas gracias Sandra. A mí también me da miedo el lobo y más si se disfraza de cordero.
      Besicos muchos.

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  3. Ufff, amiga, mejor no esperar a ver las orejas al lobo,aunque a veces Es irremediable,los humanos somo así, para reflexionar amiga.Un beso

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    1. Carmen, como han dicho siempre nuestros mayores: "Tenemos que tropezar para aprender".
      Besicos muchos.

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  4. Después del miedo suele llegar el suspiro de la tranquilidad.

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    1. Sí Toro. ¡Después de la tormenta viene la calma!
      Besicos muchos.

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    1. Muchas gracias Trini. Bienvenida a esta tu casa.
      Besicos muchos.

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  6. Ese miedo que no te deja ni respirar.

    Un beso.

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    1. Y que te acongoja y te agarrota, verdad?
      Bienvenida y muchas gracias María Dorada (Rica como las galletas).
      Besicos muchos.

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