No podía dejar de llorar cuando recibí la noticia que me dejó
hundida. Me senté en la silla de la
cocina sin saber cómo detener este llanto y toda esta confusión.
Saliste con el último sorbo de café y la carpeta bajo el brazo. Me dijiste que
ibas a ir a primera hora a terminar las firmas del préstamo. Lo que no podía
imaginar al despedirte, es que la próxima vez que te viera, fuera tras un
cristal. Asumo que no aceptaras las condiciones, pero eso ya lo sabíamos y por
muy petulante que fuera el director, no creo que mereciera ese final.
Nani.
Septiembre 2019
En pocas palabras cuentas un drama de incalculable valor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Alfred, me alegra que te haya llegado.
EliminarBesicos muchos.
Un mal día, pierde la cabeza y una tragedia de por vida.
ResponderEliminarBesos.
Un mal día dicen que lo tiene cualquiera Xavi.
EliminarBesicos muchos.
Tengo problemas con pasar a comentarte,me dice que tu pagina no existe y hoy pude llegar solo aqui.... Saludos amiga.
ResponderEliminarSandra, no sé a que se deberá. No he hecho nada nuevo al blog. A ver si cambia por sí solo.
EliminarBesicos muchos.