De
pequeña mi ilusión era ir al cine o
comprar sobres sorpresa de mis comic preferidos, aunque me quedara sin pipas de
girasol. Conseguía viajar y vivir otras vidas. Más tarde el viaje real lo
hicimos a Toledo y pasamos una noche
en la suite del hotel de moda. Fuimos
a ver una comedia que ya no recuerdo
como se titulaba, aunque nos reímos mucho. Nos divertía la definición de noche nupcial, porque nos sonaba cursis. Después
quisimos repetir, pero no hubo ocasión. El sueldo volaba con las lentejas, la
ropita y los libros de texto. Aunque no faltó amor.
Nani.
Enero 2020
Siempre lo consigues con brillantez.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Alfred, eres bondadoso y te lo agradezco mucho.
EliminarBesicos muchos.
Si no faltó amor lo demás no importa.
ResponderEliminarA mucha gente le pasa lo contrario.
Besos.
Exactamente Xavi, lo demás es añadido.
EliminarBesicos muchos.
De paqueña y ahora me gusta el cine, ver una peli en pamtalló, es una gozada sublime.
ResponderEliminarBesos musicales.
Ninfa, a mí me encanta el cine y leer. Lo gozo también.
EliminarBesicos muchos.
Que bonito relato, si hay amor lo demás no importa. Saludos amiga.
ResponderEliminarMuchas gracias Sandra. El amor lo suple todo.
EliminarBesicos muchos.
Precioso,lo importante es el amor.
ResponderEliminarAsí es... No sé quién eres, otro día pon por lo menos tu nombre.
EliminarBesicos muchos.
Nunca te falta el amor a las palabras.
ResponderEliminarCon amor Margarita, todo se puede conseguir. Es lo que nos hace humanos, no?
EliminarBesicos muchos.