Ha
bajado a recoger a la niña, vuelve sola de la clase de ballet, pero llueve como
nunca hemos visto. El barranco desbordado, arrastra agua y objetos. Se
ha detenido a unos metros. Avisa a María para que no deje salir a las niñas.
Vuelve extenuado, empapado, asustado y me dice que nunca ha visto Chiva
tan inundada. La desolación que se adhiere a la piel, nos deja
impotentes. Nos infundieron esperanza los jóvenes que vinieron a ayudar
y el helicóptero que no cesaba en la búsqueda, aunque la pérdida de tantas
vidas nos ha llenado de dolor y tristeza.
Nani,
febrero 2025
Que bien has hecho con las cinco palabras , una reivindicación, en toda regla.
ResponderEliminarMe gusto, una pena, el desastre ambiental y humano.
Besicos muchos.
Qué buen recuerdo, dejar las cosas en el olvido no es bueno. Besos
ResponderEliminarQué pena... cuánto dolor.
ResponderEliminarBesos.
¡Uy, este duele mucho!
ResponderEliminarUn beso Nani.
Muy en esa realidad que todavía duele por no estar solucionada.
ResponderEliminarBesos.
Muy bien empleadas esas cinco palabras, pero lo que nos viene encima me tiene muy preocupada.
ResponderEliminarFeliz semana nani.
Besos
Terrible desolación.
ResponderEliminarBien por tu microrrelato, Nani!
Besicos!
Duele esta entrada, pero me ha encantado cómo lo has resuelto con las cinco palabras.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Dentro de tanta desolación y tristeza, has hilvanado muy bien tu micro Nani.
ResponderEliminarAbrazos.
Las palabras vienen como anillo al dedo, Nani...Ojalá no se repita esta terrible circunstancia, que nos dolió a todos.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y admirado por tu creatividad.
Palabras dolorosas, que dejan mucha desolación y angustia.
ResponderEliminarTu historia es preciosa Tienes mucha creatividad Nani!
Besicos muchos.
Esto dolió hasta aquí... Ojalá que nunca más.
ResponderEliminarAbrazo hasta vos, Nani.
Un micro necesario y que debe recorrer cada rincón de este país y cada conciencia de aquellos que no hicieron nada y que solo piensan en sus sillones. Bueno, conciencia no tienen. Pero al menos que no paremos de recordárselo.
ResponderEliminarBesos, Nani.
Tantas historias personales, tantas vidas perdiéndolo todo...
ResponderEliminarTe aplaudo fuerte, Nani.
❤