Me dispongo a pelar la manzana más verde y brillante que hay en el frutero.
Mientras empiezo a retirar la piel con la puntillita que tengo en la cocina, imagino que cuando llegue a la apetecible carne jugosa y agridulce me podría encontrar la sorpresa menos deseada en este momento. Podría salir a saludarme un hermoso gusano y entonces me llevaría un grandísimo berrinche, la merienda que tanto me apetece se marcharía de paseo y me quedaría con tres palmos de narices, con la boca hecha agua y el estómago gritando que tiene hambre.
Algo me dice mientras sigo pelando, que mi merienda será otra. No, no hay un solo gusano sino cuatro robustas y hermosas lombrices, que se retuercen de manera tan espléndida, que parece ser se encuentran a sus anchas en su cama y de tal manera, que me ha parecido se reían a carcajadas viendo mi cara de asombro.
Nani. Marzo 2010.
No te creas, estarán fastidiadas porque les has despertado y les has quitado la manta de la cama ;)
ResponderEliminarBesicos
Cuantas veces me he llevado yo la misma sorpresa y me he tomado unos berrinches de campeonato. Luego, con el tiempo, una se va haciendo a a todo.
ResponderEliminarAhora cuando me sorprende algún inquilino simplemente aparto el trozo, lo deposito cuidadosamente con ellos en un arriate de plantas (para que continúen su ciclo), y me como el resto limpio.
A ver, la experiencia y la crisis hacen maravillas.
Un abrazo
Y bueno, peor que encontrarse un gusano , incluso, peor que encontrarse cuatro lombrices, es encontrarse únicamente medio gusano
ResponderEliminarEn la vida hay gusanos por todos lados. Hasta en la manzana.
ResponderEliminarJajajajajajajá!!!! ¿Acaso no has pensado en las cualidades nutritivas de gusanitos y lombrices???
ResponderEliminarSos divina NANI, me encanta tu mirada de niña chica en estos relatos, y definitivamente no me cuesta imaginar tu cara!
Confesión: no me gustan las manzanas!...mmmmmmm por ahí quizás en alguna tarta, o como complemento de alguna comida, más nada.
De modo que por mí, pueden quedarse a vivir en la frutera, y se las regalo con todo gusto al gusanito o a las lombrices!
Besitosísimos con toneladas de cariño mi guapísimaaaaaaa!!!
Las agarraste con las manos en la masa.
ResponderEliminarBueno, en la manzana.
:)
lo que para algunos es una desilución para otros es una fiesta... así es la vida...
ResponderEliminarBesos
Vaya, vaya, te estás superando en el arte de la divinación, jajaja.
ResponderEliminarUn beso
Hola mi Nani!...No había leído este relato tuyo tan llano y natural,la alegría de unos son las penas de otro,te veo ahí en la cocina ansiosa y alegre como siempre mirando probablemente el resto de frutas en la mesa.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande!
Pero y ¿qué merendaste...?
ResponderEliminarUn beso muy fuerte.
No me importa encontrarme un gusanillo en la manzana. No se, me parece que es más auténtica. Saludos.
ResponderEliminarAisss, puestas a tener que encontrarse algo, prefiero un gusano, las lombrices me dan más grima.
ResponderEliminarClaro, eso en las manzanas, porque en otros lados las lombrices y los gusanos andan tan juntos que casi ni se distinguen.
Muchos besicos, maestra del relato.
"Una cosa piensa el burro y otra el que lo albarda", refrán de mi madre, que vale también en este caso.
ResponderEliminarQuerida Nani, besos y :) :) :)
piuck!! Eso si me pone mal, pero bueno piensa que te arruinaron al merienda pero tu les arruinaste la siesta. Karma instantáneo.
ResponderEliminarPiensa, amiga, que cuando la fruta no tiene "bichos" posiblemente es porque fue tratada con multitud de "venenos" como llaman aqui, en Andalucia, o los fitosanitarios...
ResponderEliminarCuando tiene un bichito no hay que asustarse... Posiblemente deberian darnos mas miedo los "venenos" con los que los agricultores tratan las cosechas...
Un abrazo, amiga... Yo estoy sensibilizado a que un melocoton, por ejemplo, madurado en su punto e incluso con un bichito (que se quita y ya está) es una delicia...
hola!
ResponderEliminarte invito a que pases por mi casa
dejare la puerta entreabierta..
te dejo un fuerte abrazo!!!
Debe ser una casa cómoda vivir en una manzana, que se lo digan a los de Nueva York.
ResponderEliminarbuaggggggggggg, qué asco !! Eres el colmo...
ResponderEliminarBesotes
Jopelines...con lo feas que son las lombrices... te lo digo yo que soy una experta, ya que todos los niños a diario, en el recreo... se encargan de traerme un variado surtido para que las vea y les sonría diciendo: si, si...ya veo...un gran tesoro "lombricero" aaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhh ¡ qué jasco niña ! jajajaja
ResponderEliminarEn fin... ahora se coge otra manzana ¡y punto! ¡to sea eso!
Besos linda...
P.d: y si no te doy yo una naranja de por aquí, que están mu ricas y me las quitan de las manooooos, señoritaaaaaaaaa!!!!! jajajaja
jajaja..creo que ya no te enojaste y mejor te dio risa. Qué bueno que las dejaste seguir con su merienda. Al menos te diste cuenta a tiempo.
ResponderEliminarBesotes.
Pues tú pelas la manzana y tiempo te ha dado de ver la sonrisa de los gusanitos y yo que me gusta comérmela a mordisco limpio de esos que muerdes , cruje y luego miras el hueco dejado para encuadrar el siguiente mordisco, y es entonces cuando sabes que algo más había.
ResponderEliminarJjejeje bonito relato
Un abrazo
jajajaja dura sorpresa, amiga , me imagino que no fue tan grati el desayuno. Hermoso post , muy bien escrito. Un abrazo.
ResponderEliminarMujer, encima que estaban dispuestas a compratir su comida contigo... Jajajajajaja
ResponderEliminarUN BESAZO.
Volví.
Uggg...que asquitoooooo!
ResponderEliminarUggg...que asquitoooooo!
ResponderEliminar¡¡Qué rabia!!
ResponderEliminarMi abuelo decía que las manzanas con gusano son las mejores, porque los gusanos saben dónde se meten. Y los abuelos no mienten.
ResponderEliminarQuerida Nani, ¡a ver cuando ese dichoso gusano acaba con la manzana, que estoy esperándote!
ResponderEliminarBesitos, mientras.