Cuando
se ausentaba de casa la
niebla se disipaba y el aire circulaba. No se escuchaban gritos desaforados, ni
golpes en las puertas o puñetazos sordos en su costado o cara. Por un rato no
había sobresaltos o esa sensación tan estremecedora que se percibía a veces,
como si se tratara de un saco de patatas estrellarse contra el suelo. Podía
vivir aunque fueran unas horas. Beber un sorbo de vida, tragar un bocado de esperanza
y mirar por la ventana el sol y el camino que la llamaba.
Nani. Enero 2019
Angustiosa sensación de no poder ser. Sometida a un sin vivir continuo.
ResponderEliminarNunca podremos imaginar hasta que punto, si no lo hemos vivido Alfred.
EliminarBesicos muchos.
La libertad de salir de su propia casa, va mucho más allá de la mera sensación de "ampliar horizontes".
ResponderEliminarUn abrazo.
P.D.: por si te interesa ya está en marcha mi reto de febrero.
Rebeca, nunca podremos imaginar esa sensación.
EliminarBeicos muchos.
El monstruo ese debería ausentarse para siempre.
ResponderEliminarBesos.
Sería ideal Toro, pero la realidad es otra, por desgracia.
EliminarBesicos muchos.
Que salga, que huya, que rompa el cicho, ya!
ResponderEliminarLuisa, ojalá esas mujere vieran claro, no pasarían estas cosas.
EliminarBesicos muchos.
Horrible la situación de no poder ser libre... con pocas palabras has creado la angustia de vivir con alguien que nos llena de infelicidad, miedo y al que no queremos tener en nuestra vida.
ResponderEliminarMi cariño con un abrazo.
Me gusta mucho tu comentario Ángeles, por describes muy bien lo que quise expresar.
EliminarBesicos muchos.
Muy duro. Una realidad para muchas mujeres.
ResponderEliminarAsí es Manuela, demasiado duro!!
EliminarBesicos muchos.
Lo más triste es que es una gran realidad, de todos los siglos, pero a estas alturas ya no debería existir ese tipo de cárcel.
ResponderEliminarVeno de blog de toro, y me quedo por aquí, me gusta.
Feliz noche Nani.
No debería Carmen, pero la historia nos demuestra la autçentica y cruel realidad.
EliminarBesicos muchos.
Debería atender ese llamado a la libertad..... vivir asi no es vida.....lindo relato,. saludos
ResponderEliminarDebería Sandra, a veces las personas no tienen derecho a vivir.
EliminarBesicos muchos.
Cambiar la cerradura sería un buen plan?
ResponderEliminarbesicos
Mavi, si tiene dinero para llamar a un cerrajero, no?
EliminarBesicos muchos.