Las
palabras del joven atleta de Sabiñánigo, Nicolás Abizanda, son:
Perseverancia,
esfuerzo, valentía, empatía y humildad.
Disfrutaba
haciendo las tareas agrícolas como su padre le enseñó. Siempre le admiró,
sabiendo que sacó adelante las escasas hectáreas de las que disponía, con esas
grandes virtudes que le caracterizaba. Aprendió de su perseverancia,
sabiendo del esfuerzo que le hizo el gran hombre que, a sus ojos, se
engrandecía cada vez más. Valentía nunca le faltó para emprender y
arriesgarse, porque luchaba además con las inclemencias naturales y nunca no le
faltó empatía hacía sus vecinos que por ello mismo le adoraban. Su humildad
y todo su carisma, era un derroche de ejemplos.
Nani.
Abril 2022
Un texto de valores cumplimentado a la perfección...
ResponderEliminarAbrazo hasta vos.
Muchas gracias Carlos. Las palabras gritaban a gritos!!
EliminarBesicos muchos.
Muy bien empleadas las cinco palabras.
ResponderEliminarUn texto que rebosa estimación de valores.
Feliz tarde noche nani. Un beso
Como decía anteriormente, Carmen, las palabras gritaban esa estimación.
EliminarBesicos muchos.
Cinco palabras y un hombre del que estar orgulloso. Las personas así están en extinción.
ResponderEliminarNani, una maravilla leerte en esta tarde desabrida.
Un beso.
Ojalá vuelvan a resurgir, Ángel. Dicen que todo es cíclico, en ello confío!!
EliminarBesicos muchos.
Que lindas palabras y lo mejor que ben las has encajado en tu texto. Un placer leerte. Abrazos de buenas noches.
ResponderEliminarEl placer es mío, Campirela. Muchas gracias.
EliminarBesicos muchos.
Me ha gustado mucho lo bien que has hilado las palabras.
ResponderEliminarBesos.
Y a mí me gusta que te gusten, Xavi!!
EliminarBesicos muchos.
Nina, nos dejas en tu relato un conjunto de valores, que hoy brillan por su ausencia. Son valores de los clásicos, que aprendimos en filosofía y en literatura. Ojalá los jóvenes profundizaran en ellos. Son determinantes para mejorar nuestro mundo. Gracias por tu relato.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz jueves.
Es verdad, brillan por su ausencia. Se aprendían a pie de calle, porque todos las llevábamos incrustadas, Mª Jesús. Ojalá todo vuelva a resurgir, para que volvamos a ser humanos.
EliminarBesicos muchos.
Un texto muy bueno amiga. Saludos.
ResponderEliminarMuchas gracias Sandra.
EliminarBesicos muchos.
Grandes valores que has tejido con arte en tu relato.
ResponderEliminarMuy bueno 👏🏼👏🏼
Galilea, esta vez me costó encajar, pero si ha servido para hacer visible lo invisible, me doy por satisfecha.
EliminarBesicos muchos.
Buenisimo texto que realza los valores, donde las plabras las has insertado con gran habilidad . Beso
ResponderEliminar