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Cocinaba
excelentemente, pero últimamente decía que estaba cansada de hacer los mismos
platos y que le apenaba no conocer las distintas gastronomías de otros lugares.
Ella
que escuchaba aquellas quejas, decidió romper su hucha y fue a la librería de
Merce. La niña quería llevarle a su madre el mejor libro de cocina que la
librera tuviera en sus estanterías. Había obtenido 17,75 euros, era el total de
sus ahorros. La librera le ofreció uno que supera dicho importe. La niña se
merecía eso y más.
Cuando
mamá retiró el lazo, abrazó a su pequeña llorando hasta el infinito y mucho
más. Su llanto no fue solo de emoción. Los contenidos de los libros le
parecieron siempre, hormigas disfrazadas.
Nani, julio 2024
Muy emotivo y hermoso.😘
ResponderEliminarCurioso tu texto, ese libro de cocina es muy particular al igual que la cocinera. Un beso, buenas noches.
ResponderEliminarUn relato puro corazón. Me encantó, Nani...
ResponderEliminarLa inocencia de los niños es conmovedora.
ResponderEliminarUn abrazo.
No sabía leer... ay qué pena!!!!
ResponderEliminarImpotencia total.
Besos.
La mejor de las intenciones y una gran frustración.
ResponderEliminarEmotiva historia, Nani.
Un abrazo
Uma beleza este teu relato Nani. A pureza do coração de uma criança é sempre comovente. Gostei muito querida amiga!
ResponderEliminarBesicos muchos.
No sé si habrá entrado mi comentario porque últimamente se pierden.
ResponderEliminarMás besos.
Nani, emotivo e interesante relato, amiga...Te soy sincera le he dado mil vueltas a las" hormigas disfrazadas"...No sabía lo que quería decir, pensaba que la calidad y variedad de recetas de cocina era una labor de auténticas y trabajadoras hormigas...Hasta que he leído el comentario de Toro y creo que, he hallado el verdadero sentido: también lloraba de frustración, porque no sabía leer...Ufff, amiga...
ResponderEliminarTe felicito por el micro y tu espléndida metáfora.
Mi abrazo entrañable y admirado.
Qué micro más entrañable y conmovedor. La pobre niña de lo que ha sido capaz, me ha llegado al alma.
ResponderEliminarLa verdad es que me ha encantado.
Besos.
Todos se confabula para hacerle el mejor regalo y ella no lo puede disfrutar. Qué candidez la niña.
ResponderEliminarBesos.
Cuánta ternura, Nani!!!
ResponderEliminarBesos**