Imagen cogida de la red
EL GUARDIÁN DE LOS BESOS
Se
ha perdido por los parajes de la playa de la Calahorra, una cajita llena de
besos. Pertenece a una niña de tres añitos que está muy triste desde la
desaparición. Llevaba en ella los besos que ha ido recogiendo desde el comienzo de
las vacaciones. Los que le dieron los abuelos, titos y primos del pueblo. Otros
tantos de sus amiguitos del cole el día que se despidieron y hoy, pensaba
recoger los de los padrinos y abuelos paternos que llegan en el vuelo de la
tarde a pasar unos días con ellos.
La
niña está muy apenada porque piensa que debió cambiarla por una más grande y cree
que al encontrarse los besos demasiados apretujados, han salido volando para
acompañar a la luna como le contó la seño Lucía en un cuento y allí sabe, que no puede llegar a no ser que
la abuela Merche le haga las alas de mariposa que le prometió.
Se
ruega a quien encuentre la cajita, pase por la recepción de las parcelas Verdeagua,
nº 56 y pregunte por la familia Duero-Corvejón. Para más señas, dicho objeto
lleva un dibujo de Pocoyo que es el guardián de los besos. Los papás de la niña
recompensarán a la persona que entregue dicha cajita, la niña no tiene consuelo
y solo desean verla de nuevo sonreír.
Nani. Julio 2014