jueves, 27 de marzo de 2025

MI TOSTADORA

 


Foto de Elena López García

Hace algún tiempo nos dijeron como si fuera una novedad de ultimísima moda, que había que reciclar, como si nuestras abuelas y bisabuelas no lo hubieran hecho siempre. El barreño de cinc que se picaba y terminaba con un agujero o varios, servía para sembrar las prímulas o las margaritas que se ponían en el patín que todas las casas solían tener delante de la puerta de entrada. He visto lavabos que se han rajado, bañeras, bidés y por supuesto tazas de wáter, con plantas de todas clases, sobre todo de las pequeñitas que salen en primavera y otoño (margaritas, lobelias, etc.)  y, hoy con la vida moderna que llevamos, tiramos todos esos objetos en los barrancos y caminos y así nos va, porque además y a pesar de que sabemos que debemos reciclar, no lo hacemos por dejadez, falta de tiempo o por lo poco cívicos que somos en ocasiones. Todo esto contamina nuestros bellos paisajes naturales y se vuelven en nuestra contra, y  no lo tengo que decir, ya que se nos está mostrando día a día por desgracia.

Recuerdo cuando se me estropeó la tostadora. Sabía que debía ir a tirarla al punto limpio, pero he ahí el dilema, el tiempo que nos acosa y nos falta. Empezó a dar tumbos por distintos recintos de mi hogar, hasta que se me encendió la luz. Cogí las tijeras de arreglar el pescado y corté el cable. Limpié bien el interior de la tostadora y la rellené de tierra. Compré una macetita de esas que venden en algunos super de “pensamientos”, que me gustan con locura y más si son malvas o lilas y la trasplanté a mi improvisado tiesto. La puse en la ventana baja de mi casa y recuerdo que mientras que leía o hacia cualquier actividad, veía a las personas pararse y sonreían mientras contemplaban mi tiesto improvisado, incluso recuerdo haber visto al alguien hacerle fotos, y es que parecía sonreír a todo el que pasaba. Estaba agradecida de que le hubiera renovado la vida y se notaba que devolvía el favor mostrando su mejor semblante en forma de flor.






Fotos de Nani Canovaca

Nani, marzo 2025

 

 

lunes, 24 de marzo de 2025

SÍNDROMES

 


Él finge que no le importa como le enseñaron debía hacer, pero la procesión va por dentro, así como la imagen de la catana que va a usar para liquidar el problema. De esta manera pasará página, de otra manera nunca. Y seguramente, en adelante la luz la verá tras alguna reja, pero ya lo ha decidido. Es lo que tienen “los tabúes, los por si acaso y el qué dirán”, se enquistan y desencadenan el síndrome que padece.

 

Nani, marzo 2025

 

jueves, 20 de marzo de 2025

LAS ARRUGAS DE LA SUPERVIVENCIA

 


Ilustración: Manuel Prego de Oliver (1915-1986).



A los que me enseñaron a valorar la vida

 

La miro y descubro en cada arruga, una experiencia. Las dos que están más pronunciadas y que surcan su frente, hablan de lo difícil que le resultó ser mujer en aquella aldea, rodeada de hombres acostumbrados a arrancar hierbas, preparar la árida tierra, dejar las semillas, arar, mirar el cielo esperando la lluvia y volver a casa ya anochecido, pasando primero por la taberna y llegar con la mente nublada. Ella comprendía que era grande la lucha de aquellos hombres rudos, siempre lidiando con las inclemencias del tiempo y la escasez de todo, pero, ¿quién la entendía a ella y su soledad? ¿A quién podía hablar de las grietas en sus pezones cuando sus hijos mamaban y no había otra cosa para aminorar el dolor, que morder el trapo de la cocina? ¿A quién podía hablar de su lucha por combatir el frío de las criaturas en las noches de invierno o cuando empezaban a ir a la escuela, con ropas zurcidas ciento de veces? Podría contar tantas cosas de las que he leído en esas dos arrugas que hasta si me esfuerzo, escucho el grito de impotencia y desesperación por la poca comprensión del mundo en que le ha tocado vivir.

Y si hablo de las arrugas que tiene en los pómulos y nariz, podría contar que son las que le produjo la exposición al sol, cuando iba a lavar al río, a tender la ropa y pañales diarios, las cobijas o cuando tenía que arrancar garbanzos, ayudar en la siega o la recolección de cualquier cereal que les proporcionaba el sustento diario.

Aunque las arrugas que me han conmovido más, son las de sus ojos y la comisura de la boca. A pesar de la dureza de su vida, también ha reído y eso se refleja en el brillo de sus pequeños ojos cada vez más reducidos y las que se le pronuncian aún más, cuando ríe con ganas y enseña alguna mella en su dentadura deteriorada y que coqueta tapa con su mano izquierda, para que sean menos visibles esas faltas, pero que a pesar de todo no reprime e incluso carcajea temblorosa por la edad, pero siempre con firmeza.

Y si miro esas manos que han cargado de todo y los surcos que las pueblan, me hablan de la fuerza que ha tenido para soportar cualquier experiencia impensable y, que han ayudado a su espalda a llevar la mochila de los días y…, te podría contar que esas arrugas ahí encontradas, son las que con más claridad hablan de cariño, paciencia, resignación y sobre todo, de amor por los suyos y por cualquier ser que por su puerta ha pasado pidiendo algo de comer, alguna ropa para cambiar por la que llevaba hecha harapos o dónde poder reposar por unas horas los huesos mal trechos del camino recorrido, para poder reponer fuerzas y continuar, porque siempre supo que todos llevaban cargas, arrugas en el alma y que con el paso del tiempo se quedaban selladas casi a fuego.

Esas arrugas me han dicho tanto, que podría hablar sin término de las vidas que solo tuvieron el sol que los calentaba y la luna que, con luz de plata los iluminaba.


Relato publicado en el Nº 38 de la Revista Pansélinos del mes de marzo. Podéis descárgala gratis, pinchando aquí 



Nani, marzo 2025

 

martes, 18 de marzo de 2025

EL ESPEJO HABLA

 


Las palabras para la asociación Cinco Palabras  que Javier Sandoval nos ha regalado son las siguientes:

Diversidad, capacidad, ayuda, cariño y guerrera.

 

En clase hay diversidad de niños la mayoría muy valiosos. Uno de ellos es de alta capacidad, ocasionándole acoso por parte de compañeros que se creen con derecho a discriminar al que es distinto. He pedido que se miren al espejo, se pongan en su lugar y me respondan que ven. Una chica contesta que pediría ayuda porque no soporta lo que descubre y que son celos lo que han desarrollado. Con compasión y mucho cariño, le digo que sin respeto no será la guerrera que desea, porque todos somos admirables, especiales, distintos e igual de valiosos al mismo tiempo.

 

Nani, marzo 2025

sábado, 15 de marzo de 2025

LOBA

 

 

Imagen de la fotógrafa mexicana Estrella Josento

Aquella mujer no sabía de días de.., ni de reivindicaciones. Había sido siempre una loba defendiendo su manada y su humilde hogar, no sabía de otra cosa. Su hombre era como todos los que había conocido. Querían a su prole a su modo y a su compañera de vida como lo hizo su padre, abuelo, bisabuelo o tatarabuelo. Ella y las de su entorno, hablaban y reconocían que la educación debía cambiar empezando en sus propias casas y por ello, dialogaron y transmitieron a sus retoños que era fundamental practicar el respeto hacia los demás y a ellos mismos, de no forzar situaciones cuando se les daba una negativa ya que todo el mundo debía decidir por sí mismos fueran hombre o mujer, o de valores y formación. Y, sobre todo debían tener en cuenta y lo repetían hasta la saciedad, que nadie merecía ser tratado como a un espantapájaros, ya que estos son peleles y el ser humano debe ser un ente de luz.

 

Nani, marzo 2025

martes, 11 de marzo de 2025

OTROS TIEMPOS

 



Imagen, https://plantasyjardin.com/2012/11/la-flor-del-azafran-crocus-sativus-la-rosa-del-azafran/#google_vignette

(Palabras sugeridas: Azafrán y vidrio).

 

Hace mucho tiempo, escuchaba en las emisiones nocturnas de radio y junto a mi madre, las zarzuelas que se daban, por ello conozco “Agua, azucarillos y aguardiente”, La Verbena de la Paloma o La Rosa del Azafrán”, entre otras muchas más. Era el respiro que tenía después del durísimo trabajo diario, que la llenaba de alegría, risas y música. Mientras tanto y sobre el vidrio de la mesa camilla, repasaba la ropa y yo terminaba los deberes para el colegio y aunque eran horas muy tardías para una niña, por entonces solíamos ayudar en casa y los horarios eran aleatorios y se nos requería siempre que éramos necesitados. Nuestras casas o la mía en concreto, era de esas que, si los hijos no arrimaban el hombro por poco que fuera, no se alcanzaba el ritmo requerido.


Nani, marzo 2025

viernes, 7 de marzo de 2025

LLUEVE POESÍA

 



CONVOCATORIA DE POEMAS Y RELATOS A FAVOR DE LOS DAMNIFICADOS DE LA DANA, CHIVA. XII ANIVERSARIO CINCO PALABRAS.

Podéis participar pinchando aquí.

 

Es un alivio,

ver llover poesía delicadamente.

A veces,

cae la lluvia a raudales

y la riada se lleva los versos,

pero cuando lo hace pausadamente,

las palabras convertidas en agua,

van regando las semillas,

las vivencias y, sobre todo,

los sentimientos,

que crecerán siendo versos.

 

Cuando las lluvias son torrenciales

cargadas de furia

en lugar de versos caídos,

lo que arrastran esas aguas

se transforman en lágrimas

capaces de arrasarlo todo,

convirtiendo tristemente

en inolvidables los momentos,

minutos, horas y días.

 

Aunque al pasar el tiempo

volverá a llover poesía,

esta limpiará el barro,

y mitigará el dolor tragado

por aquellos que ya no volvieron

y aunque haya quienes no los reconozcan,

en los corazones todo quedará,

porque el olvido no es posible.


Nani, marzo 2025

LA CASA ENCENDIDA