martes, 15 de febrero de 2011

NO MI TORMENTO


Relato hecho para el programa de radio de Canal Sur "¿Y Por qué no?" y leído la noche del pasado día 8.

Esta mañana cuando desayunaba como todos los días he cogido la prensa para ponerme al día y he buscado tu columna. Me gusta como pones día tras día los puntitos sobre las “ies”. Todavía no influyen en ti ni las agencias, ni tus superiores. No sé como te las arreglas para que tus letras sean distintas al resto de compañeros que más o menos dicen lo mismo. Hoy el periodismo ha dejado de informar, para darnos una serie de noticias que nos desasosiegan e inquietan y si te digo la verdad, para mí son un tormento, por eso te busco y desayuno contigo, quiero que mi día comience informada, que pueda respirar a lo largo de la jornada y por eso te he bautizado como: “No mi tormento”.

Nani. Febrero 2011.


Safe Creative #1103018610113





miércoles, 9 de febrero de 2011

EL BESO

Colaboración con Maria Pan, para su exposición en PUB WASABY (DOS HERMANAS) SEVILLA

Te beso y reflexiono.

No te miro triste,

sino que te pienso al tenerte cerca.

En ti y en mí, pienso.

En mí y en ti,

para ser uno,

mientras te huelo.

Me besas y reflexionas.

Tu mirada es alegre y dulce,

porque eres explosión,

brillas como las estrellas

y no te importa el mañana

sino el instante del beso y la mirada.

Nos besamos y reflexionamos,

Las miradas se nos cruzan

y la vida fluye.

Nos besamos y nos miramos.

Vivimos y reflexionamos,

para tan solo, estar.

Nani. Febrero 2011.


Safe Creative #1103018610106






miércoles, 2 de febrero de 2011

SUPERFICIAL HERIDA




El dibujo se lo he cogido prestado a María Pan

La bala en la sien pasó rozando. Una herida superficial que apenas dejaría huella fue el recuerdo que le dejó, aunque el miedo si atravesó el cráneo y penetró de lleno en lo más profundo para toda su existencia. No se andaba con chiquitas y fue la providencia la que le salvó la vida, aunque nadie le salvó del dolor y el maltrato derramados en el plasma y en cada poro de su piel.

Nani. Febrero 2011.

Safe Creative #1103018610120

viernes, 28 de enero de 2011

"SEÑOR"

El dibujo se lo he cogido prestado a María Pan.



En varios kilómetros a la redonda ninguno supo decir su nombre. Es difícil de pronunciar y es por eso que los lugareños le llamamos “Señor”. Cuando llegó no sabía decir ni una sola palabra en nuestro idioma, a excepción de esa palabra con la que fue apodado. Cuando alguien se dirigía a él tanto daba que fuera hombre, niño o mujer, siempre contestaba con aquel acento extraño: ¿“Señor”? Y con ese apodo fue bautizado y así se le conoció en todos los lugares donde fue requerido y donde se ganó el sustento y la vida. Cuando llegó era un muchacho adolescente de piel tersa y brillante. La primera vez que le vimos estaba desfallecido y si no hubiera sido por el abuelo que le dejó estar en la cabaña de los aperos, no le hubiéramos disfrutado, ni hubiera jugado con los chicos del pueblo a los que enseñó a utilizar la piedra en sus juegos y al que todos ellos le conoce por ese nombre que no fue el suyo de nacimiento y sí, el que adoptó junto a todos nosotros.

”Señor” quiso quedarse y en un principio ayudó a todos, después trabajó duro y consiguió enviar dinero a casa, pero no quiso volver a pesar de quedársele impregnada en la mirada, toda la arena del desierto y el sufrimiento de su tierra.

En el pueblo fue el “Señor” que nos enseñó a respetar y el valor de la humildad y la educación aunque algún que otro adinerado creyeran que los “señores” eran ellos, pero tenía algo especial que le hacía diferente y todos lo supimos siempre. Jamás tuvo que decir nada para que todos entendiéramos que era él, el verdadero ser “especial” de la comarca al que ahora que ya era querido por todos y respetado hasta por los más arrogantes, le añoráramos al saber que volvía al lugar que nos lo envió.

Nani. Enero 2011.

Safe Creative #1103018610137



martes, 18 de enero de 2011

LA ABUELA


El dibujo se lo he cogido prestado a Maria Pan

Recuerda a papá que baje la tapa con mucho cuidado que el cristal es demasiado delicado. La jarra es la única que nos queda y con ella se van los recuerdos de la abuela y el mimo que ponía a sus cristales. Ella tenía tiempo de ocuparse de las celebraciones, ¡ay!. Ahora con el trabajo y las prisas, rompemos todas esas delicatessen y con ellas se esfuman los recuerdos más queridos de infancia, cumpleaños, navidades, comuniones, primos, tíos y lo que más me duele, su recuerdo.


Nani. Enero 2011.


Safe Creative #1103018610168

jueves, 6 de enero de 2011

LOS BUZONES... ESPERAN


© Buzones camino de La Hortichuela

Sólo había pedido a los Reyes Magos recibir una carta. Tan sólo quería que le enviara unas letras dentro de un sobre sencillo. No pedía un testamento, ni una epístola, ni tan siquiera un folio por las dos caras y menos aún, un correo electrónico (en el cortijo no había de esas cosas modernas que decía su padre). Se hubiera conformado con unas cuantas palabras metidas en un simple sobre cerrado al que hubiera rematado con un sello y que el cartero dejaría el jueves de la semana que se hubiera remitido, cuando pasara por el cerrillo donde se encontraban todos los buzones del conjunto de cortijos. Ni tenía que bajarlos y buscar a los destinatarios. Ni tendría que preocuparse por que no llegara, porque de más sabía que aunque tardara algo más que en las ciudades, llegaba siempre (en otro tiempo así fue), ni tendría que pensar en el esfuerzo que suponía después de la jornada y antes de ir a ducharse y cambiarse la ropa de faena, que saliera corriendo, subiera el cerrillo, abriera el buzón y encontrara la misiva que tanto ansiaba (en otro tiempo no le importó) y ahora, ya casi había perdido la ilusión. Ahora hacía ya muchas jornadas que no corría, que ni aún lo jueves subía el cerrillo para terminar jadeante delante de los buzones, no, ahora simplemente esperaba a que algún miembro de la familia fuera el que recogiera la correspondencia. Pero y sin saber porque motivo, había cambiado en las fechas navideñas y como colofón, el día de Reyes Magos. Subió después de la jornada de recogida de la aceituna, pero solo encontró el sol poniéndose, las piedras húmedas, el ladrillo roto, el olivo en su sitio, el rosal mustio y la carretera solitaria.

Nani. Enero 2011.

Safe Creative #1103018610151


miércoles, 29 de diciembre de 2010

REVUELO EN LA COCINA





… y empezó a sofreír la cebolla cuando notó que se movía algo al fondo de la cocina.

Se le erizaron los vellos pensando que pudiera haber entrado un mal bicho por alguna rendija de la ventana o la puerta y con mucho desasosiego se acercó al lugar donde le pareció que el movimiento se producía y a pesar del pánico que le embargaba solo pensar en algo desagradable, se armó de valor y allí estaba escoba en ristre moviendo la orza de la pringá, la de las aceitunas partidas y la cántara del aceite. No encontrando nada movió también la canasta con los roscos de vino que había sacado del horno y que esperaban a que unas manos (muy probablemente las suyas), los metieran en bolsas de a diez para así ir sacando en la fiesta de cumpleaños y repartir el resto a los invitados al término de la jornada.

Como no encontró nada y su inquietud se relajó, volvió con apuro a los fogones donde había dejado esa cebolla que empezaba a confitarse y no podía descuidar. Había comenzado por lo que sería el adorno y complemento de la receta “Mil hojas de berenjena con queso de cabra y reducción de vinagre de Módena al chocolate”. Ahora debía continuar cortando las rodajas de berenjena e ir poniendo a la plancha con unas gotas de aceite para hacer sin que resultaran grasientas y mientras tanto, ir preparando las porciones que harían las cubiertas de queso fresco de cabra y gratinar con unos toques de soplete…, pero volvió a escuchar algo que no era normal en aquella su cocina pareciéndole percibir el movimiento de la panera que había quedado encima de la mesa.

De nuevo le corrió un ligero escalofrío por la nuca y casi no se atrevía a mirar abiertamente, cuando notó que algo brillaba tras la jarra del agua. Miró más atentamente y vio dos ojos brillantes como fuego, que la miraban a través del trasparente cristal de la jarra. Se acercó para ya asegurarse del hecho y cuando apartó con gran cuidado la jarra, disparado saltó un animalito negro como el tizón que asustado y enfurecido maullaba enloquecido al verse acorralado.

Intentó serenarle y al ver que no lo conseguía y que se agazapaba es una esquina de la cocina, se le ocurrió coger un plato viejo y llenarlo de leche. Lo posó sobre el suelo cerca del minino y este que parecía hambriento, se lanzó a él lamiendo sin parar, pero mirando de vez en cuando con desconfianza.

Volvió a la plancha donde terminaban las berenjenas de hacerse y estando en su punto, comenzó a colocar en un plato cuadrado, blanco y muy moderno, donde puso por capas las berenjenas con el queso. Gratinó con ayuda de un soplete y como colofón, terminó con la cebolla que confitada ahora esperaba su turno, rociando con la reducción de vinagre de Módena y adornando con unas escamas de sal maldon.

El gatito seguía ahora mirando hacía su persona y reclamaba otra poquita de leche o manjar similar que le mitigara el hambre de su huérfana vida. No sabía el felino que allí no era el sitio donde él debería estar, así que sacó el mismo plato al patio con una olorosa sardina donde empezó a dar cuenta de ella, intuyendo que no podría entrar nunca más al lugar de donde había entrado de polizón.

Nani.


Deseo que paséis una feliz Nochevieja y que 2011 os conceda todo lo que en el fondo de el alma deseáis.