lunes, 22 de febrero de 2021

OSADÍAS Y APRENDIZAJES

 

Las palabras del chef Mitsuharu 'Micha' Tsumura para los Escritores Solidarios de Cinco Palabras en apoyo a KURAQ TAYTA son las siguientes:

Macambo, paiche, kukama, piraña y doncella.

Creo haber sido un poco osada con estas palabras que hoy nos ofrecen en la página solidaria, cincopalabras.com

Tenemos menú sorpresa. Helado con el macambo que queda en la cesta. Te vas a chupar los dedos. Para el almuerzo paiche al horno con miel y plátanos verdes. Me enseñó una señora viejecita a cocinar estos majares,  cuando visité la zona de Kukama allá en Perú. La gente es preciosa  y fueron muy cariñosos. Disfruté, aunque pasé un gran susto el día que fuimos al río y como no conozco a la piraña y soy un poco osado, estuve a punto de tener un accidente, si no me protege aquella dulce doncella que me estuvo acompañando en la excursión.

 

Nani. Febrero 2021

viernes, 19 de febrero de 2021

CRÓNICAS DEL DÍA

  


Última hora: El periódico que informa directamente de la NASA, acaba de comunicar que El rover Perseverance acaba de amartizar al borde del cráter Jezero, dónde habían decidido colocar la consabida bandera y, que de ese mismo cráter han salido unos individuos más bien de color rosado ¡todos creyendo que serían verdes!, gritando que quien le ha dado permiso para colocarse precisamente encima de sus criaturas más bellas y qué era lo que hacía.

En la NASA incomprensiblemente, se entiende lo que el tal “individuo” residente precisamente en su planeta, decía. Como si un traductor simultaneo estuviera transcribiendo y además les ha notificado, (dirigiéndose a la cámara que graba); que se guarden muy mucho de hacer lo que tienen por costumbre los humanos, que ni les van a permitir que los invadan, ni que los aniquilen y menos aún, que los discriminen por ser seres distintos a los humanos necios y que por supuesto, gasten menos  dinero en llegar hasta allí y lo apliquen a los suyos que sería más efectivo. ¡Y por supuesto, los dejen vivir en paz, algo que los humanos no saben hacer!

 

Nani. Febrero 2021

martes, 16 de febrero de 2021

BULLING

 

Cómo íbamos a imaginarnos que no sabía nadar cuando la empujamos y cayó a las profundidades.

─ ¡Los niños son crueles, se escuchó a nuestras espaldas!

El socorrista de la piscina al ver que no salía, se tiró y la sacó al instante. Le había dado tanto miedo que perdió el conocimiento. La reanimó y seguidamente, todos fuimos expulsados.

Desde entonces y después de sufrir una gran reprimenda y una sanción, no volví a mojarme en ningún lugar a excepción de la ducha.

No siempre los niños son graciosos y si no son educados, pueden ser rapiñas y destructores.

 

Nani. Febrero 2021

lunes, 15 de febrero de 2021

NIÑO SOLDADO

 



Soy un niño que nunca he probado una onza de chocolate con pan. Me dan otro tipo de chocolate para que tenga el valor de apretar el gatillo, imaginando que doy unos acordes de guitarra. A veces no sé quién soy y creo que no llegaré a cumplir los dieciocho.


(Hay quienes prefieren morir de cualquier cosa, porque no han conocido otra manera o no se les ha dado otra opción).

Nani. 13 febrero 2021

viernes, 12 de febrero de 2021

TARDE DE CARNAVAL

 


 

Este año son ya muchas las cosas que estoy echando de menos. No veo a mi familia, a mis amigos, ni casi a mis vecinos y ahora todos los medios  hablan de carnaval. De disfraces, de máscaras, antifaces, ropas vistosas y coloridas y sin apenas pensarlo, me encuentro delante del armario donde guardo todos los disfraces que nos sirvieron a la familia, a mis hijos y rebusco con ahínco.

He sacado un traje de zíngara, con mucho color y mucho vuelo la falda. La blusa es  blanca y combina con un chaleco del mismo tejido que la falda. Las botas que llevo puestas me pueden servir. Necesito pelo largo y busco en el altillo que es donde están guardadas las pelucas, en una caja de plástico de esas grandes de todo a cien. Saco una de pelo negro largo con bucles. Lo deberé acompañar con una diadema de esas que van a la frente, con monedas ruidosas y muy brillantes, ¡recuerdo que había una! Pulseras ruidosas también con monedas y colgantes varios.

Comienzo por maquillarme, (me acentúo los ojos, los exagero). Me coloco unas largas pestañas, las cejas las resalto también y los labios los pinto rojo calmil muy perfilados. Si salgo a la calle, deberé ponerme una mascarilla, pero la voy a cubrir con un pañuelo muy colorido, que le puede ir muy bien con el traje escogido. Estoy pensando que como me he maquillado tan detalladamente, me voy a colocar un antifaz que recuerdo tenía, donde los ojos no se ocultan, sino que los engrandece.

Termino de arreglarme,  busco la faltriquera y guardo algo de dinero, unos pañuelos desechables por si los necesito y por supuesto, las llaves de casa. Cojo un mantón de lana y me lo pongo, los días están siendo fríos. Me doy el visto bueno en el espejo que tengo en la pared del dormitorio, donde me puedo observar de pies a cabeza. Me veo aceptable, así que voy a ver si me doy un paseo al aire libre. No pienso en que ya sobrepaso la hora del toque de queda y que no debería salir sola, no es aconsejable, pero ya después de tantos días de confinamiento sí, confinamiento también, creo que se me ha ido un poco la pinza. Solo pienso en pasear y si creo que voy a pasar desapercibida, ¡lo llevo claro!

Salgo a la avenida solitaria y húmeda. Voy feliz pensando que nadie me va a conocer y paseo tranquila. De pronto creo que alguien me está siguiendo, pero no quiero darme la vuelta. Cada vez noto los pasos más próximos a mí y como estoy cerca de una nueva boca calle, apresuro el paso y me meto donde sé que a la vuelta, hay un soportal dónde puedo pasar desapercibida entre las grandes columnas. Así lo hago y aunque el corazón se me ha subido a la boca, intento acallarlo y ver si pasa de largo la persona que me persigue. Resulta ser un chico que suele andar por las plazas, poco recomendable, que seguro pretende sacarme lo que llevo encima para comprar alguna papelina. Se detiene desconcertado y al comprobar que he desaparecido de su visión, se vuelve por donde llegó y yo espero. Pasado un tiempo prudente, sigo por la calle donde me he refugiado. Tendré que dar una gran vuelta, pero lo prefiero antes de volver a tropezarme con el yonqui, no es mal chico pero seguro que está con el mono y no es recomendable tener un altercado con él. Ahora caigo en mi imprudente paseo y reconozco que no debí hacer esto que en otro momento, no habría sido nada del otro mundo e incluso me lo hubiera pasado bien con todos los demás disfrazados, pero hoy no estoy nada más que yo en la calle, y para más inri, deberé pasar por delante del cuartelillo, donde estará alguno de los guardias en la puerta. Hoy se me va a caer la peluca, el pelo y hasta las pestañas.

Decido seguir adelante y que sea lo que tenga que ser. Si he metido la pata, tendré que apechugar con la multa que me caiga, pero para disparates, los que nos proponen en el taller literario, y hoy creo que me he colado un poco, porque no tenía mucha inspiración y he preferido irme un poco por la ramas y rellenar un folio con un poco de locura, que de vez en cuando no está mal. En el mundo de las letras, creo que todo está permitido, lo malo es que quienes nos leen, sean capaces de llegar hasta el final.

 

Nani. Febrero 2021

miércoles, 10 de febrero de 2021

CONSUELO

 Su marido era insufrible pero después de haber tenido el accidente y haber fallecido, le echaba de menos, sobre todo, la compañía que le daba mientras discutían. Ahora no sabe si quiere acompañarla de alguna manera o comunicarse con ella, pero desde hace unos días, cuando se sienta a la hora del almuerzo, los cubiertos que coloca los encuentra cambiados y mientras va a la cocina a por la ensalada, la jarra de agua desaparece y la cerveza piensa que alguien se la bebe a medias, como antes pasaba.

─Sigue siendo insufrible ─piensa. Pero no estoy tan sola.

 

SATISFECHO

Su marido era insufrible, maniático y celoso, le dijo al párroco, cuando este le preguntó. Quería pronunciar unas palabras en el funeral.

─ ¿Pero no tenía algo positivo? Piense en sus hijos, algo les aliviará si ponemos un puntito a su favor.

─Sí D. Pascual, era muy ahorrativo ¡tacaño! y todo lo guardó para después. Pasamos hambre y ahora no sabemos dónde lo guardó. A veces creo que se lo tragó y eso lo lleva con él para siempre. Igual ha sido lo que se lo ha llevado. Diga por ejemplo, que se marchó satisfecho y que consiguió lo que quiso.

 

Nani. Febrero 2021

lunes, 8 de febrero de 2021

BALADA




Sé que mi melena es muy especial, en particular lo fue para mis progenitores. Mi padre decía que era música y que en mis cabellos estaban enredadas todas las notas de un pentagrama. Cuando era niña me encantaba que me hablara de esa manera, mientras jugaba en la alfombra con mi colección de cromos, mis muñecas y ellos escuchaban aquellos discos de vinilo,  que con todo el amor limpiaban con una gamuza amarilla cuando los sacaban de la funda,  para colocarlos en el pikú como llamaban a su tocadiscos y más tarde, antes de volverlos a introducir. Se embelesaban con sus bandas sonoras o canciones predilectas y sabía lo que encontraría entre mis cabellos, según el tipo de melodía que sonaba. Me acariciaba el pelo patinando a ritmo del vals, mientras expresaba que brillaba en clave de Sol. Si eran pasodobles, bailaban y reían, mientras apuntaba que tuviera cuidado con las fusas y las corcheas que resbalaban en cascada. Cuando era música más serena o algo más lírica, mi pelo se inundaba de silencios y a veces, cuando evocaban aquellos grupos de la época, comentaban que las notas giraban en torno a mí, porque era toda melodía y fruto de ella. Todo eso no lo entendía de pequeña, pero me agradaba verlos felices, contando todas esas historias. Ahora cuando escucho a los Bravos, los Pekenikes, a Miguel Ríos o alguna zarzuela, noto que por mi pelo bailan las corcheas, blancas, semifusas y hasta las redondas, que a su vez, me producen tal cosquilleo por todo el cuerpo, embargándome la  emoción y bella nostalgia. La primera vez que fui a la ópera lo hice sola, ¡ya no estaban ellos! Estuve en el palco más barato porque mi poder adquisitivo no era para tirar cohetes, pero fue una verdadera delicia escuchar la voz de una soprano en directo. Con ellos me acostumbré a escuchar a la Caballé sobre todo, aunque también a la Callas y alguna más, junto a sus homólogos masculinos, pero en esta ocasión tenía la oportunidad de ver in situ a Ainhoa Arteta. Fue una experiencia increíble. Mi pelo en esos momentos se inundó sobre todo, de recuerdos gratos y el pentagrama de mi vida resbaló por mi rostro, agradecida de todo lo que aprendí creyendo que era un juego y hoy es mi sustancia, mi profesión y el sentido de mi existencia. Sé que estoy repleta de bandas sonoras, canciones, notas musicales y niños a los que enseño con el mismo cariño del que me empapé. La música forma parte de mí. Soy pura balada. 

Nani. Febrero 2021


Relato publicado en el libro digital publicado por "CAFÉ ESPAÑOL III", Página 219.


https://premio-cafe-espanol-relato-corto.webnode.es/_files/200000455-576d7576d9/Caf%C3%A9%20Espa%C3%B1ol%20III.pdf