Relato incluido en la antología "Escritores por el mundo". II certamen microrrelatos "Academia de Escritores", fallo 10 de enero de 2019.
Mis
pensamientos se maduran a veces en el tostador, otras en la cazuela y a fuego
lento y muchas otras en el horno para darles forma, un toque de lucidez al
gratinarlos o un sabor añejo y con buqué, si los macero o los adobo con un buen
vino de la tierra. Cuando pasan por momentos amargos, intento aderezarlos con
un excelente vinagre de calidad preferible ser de la tierra, depende de la
amargura y el deseo de transformar estos para conseguir un escabechado; pero si
lo que pretendo es que se endulcen, los macero con abrazos, cariño, empatía y
respeto, no hay nada como un aliño hecho de amor, ternura, comprensión y
afecto, por ejemplo. Este punto meloso es el que mejor resultado da y produce
ablandamiento en las tendencias esquivas
o poco reflexivas, relaja las desconfianzas y ayuda a superar egos y
decepciones.
Nani. Septiembre 2019